miércoles, 7 de julio de 2010

Textos literarios, ¿sí o no?

Una profesora y coordinadora de profesores nos ha escrito un correo en el que plantea que a la mayoría de sus alumnos no le interesan los textos literarios, no conoce ni siquiera a grandes autores de su lengua o su país y que, por tanto, difícilmente se va a interesar ni por Cervantes. En consecuencia, opina que no se puede o no se debe introducir en la clase textos literarios.


¿Qué opinas tú? Responde a estas preguntas y en breve publicaremos el resultado de la encuesta:


- ¿Usas textos literarios en tus clases? ¿En qué niveles?
- ¿Les gusta a tus estudiantes trabajar con textos literarios?
- La profesora que nos manda el comentario trabaja en Brasil. ¿Podrías indicar dónde trabajas tú para poder hacer un mapa geográfico de las respuestas?


El motivo del comentario de la profesora brasileña surge a partir de un taller que tuvo lugar en el salón de actos de Disal en Sao Paulo. Si quieres ver el taller , puedes hacerlo en: http://itv.netpoint.com.br/disal/principal.asp?id=19

13 comentarios:

  1. Yo sí utilizo textos literarios, pero nomalmente en los niveles intermedios y avanzados.
    A mis alumnos sí les gustan, siempre que, evidentemente, no todas las clases estén basadas en textos literarios, es decir que haya variedad de textos, que no sean muy difíciles y que la explotación didáctica no sea muy "literaria", sin que vaya más hacia la lengua y la comunciación práctica.

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  2. Pues yo creo que depende, no todos los alumnos son iguales, pero una canción, un poema, un trocito de una novela, no sé, a mí me suele dar buen resultado. Yo trabajo en Polonia. Por cierto, buena idea la de grabar los talleres y poderlos ver en diferido.

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  3. Teresa López Ruano7 de julio de 2010, 11:44

    A mí me gusta mucho, pero tiene razón la profesora de Brasil en que no hay que hacerlo muy técnico. El estudiante tiene que notar que lee para conseguir aprender mejor la lengua. Como yo no soy filologa, sino historiadora, pues no lo analizo en plan curso de literatura, sino como comentario lingüístico, para sacarle provecho en el aprendizaje. Me gusta, la verdad, el planteamiento de los textos literarios en Pasaporte B2, me están dando muy buen resultado aquí, en Alemania. Un saludo a todos y todas.

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  4. Pues a mí me gusta mucho usar textos literarios en mis clases. Siempre me han dado buen resultado y han sido de estímulo para mis estudiante (en los niveles iniciales los estudiantes han ganado más confianza y en los niveles intermedio y avanzado han supuesto siempre un reto a superar). Sinceramente creo que son un buen instrumento didáctico que nos ofrecen muchas posibilidades y que funcionan, al menos en el caso de mis estudiantes, como agente motivador para la práctica comunicativa de la lengua. De hecho, son muchos los manuales de enseñanza/aprendizaje del español como lengua extranjera que dan cada vez más importancia a la presencia de textos literarios. Quizá a muchos estudiantes no les motiva trabajar con este tipo de textos porque piensan en las clases de literatura que tuvieron o que son muy difíciles, pero tenemos que hacerles ver que no es una clase de literatura en la que tienen que aprender fechas, autores, estilos, etc., sino que son una herramienta más para que aprendan.
    Por otro lado, los profesores no debemos olvidar que los textos literarios son un material auténtico muy rico y variado que contiene ejemplos de la cultura de la lengua que enseñamos. Por supuesto, hay que tener en cuenta que siempre tenemos que hacer una selección apropiada de estos textos según el nivel y los objetivos de enseñanza/aprendizaje de los profesores y de los alumnos. Y siempre tendremos que tener presente que sean textos motivadores para nuestros estudiantes. Esto les estimulará a querer leer y saber más y por supuesto, disfrutarán con ellos.
    Un saludo a todos.

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  5. Educar supone una transmisión cultural y una mejor calidad de vida. Por eso, una de las funciones de la escuela es despertar el interés, o por lo menos presentarles lo que desconocen. A nadie le puede gustar algo que no conoce. Pregunté a mis alumnos de nivel elemental si les gustaba la poesía. Todos dijeron que no. Sin embargo, después de darles una de Mario Benedetti, me pidieron más porque eso les motivó a seguir aprendiendo. La solución es usar algunos textos literarios cortos y de manera que les parezcan tan inspiradores como es la música en clase. La literatura en español es muy rica y nos permite trabajar varios temas en todos los niveles. Para eso, es imprescindible leer un poco de Cervantes, Neruda, Borges, Cortázar y muchos otros. Además, también hay los autores contemporáneos que están más cerca de como hablamos y escribimos hoy en día. El libro didáctico es importante, pero el profesor necesita conocer textos literarios, saber enseñarlos de manera creativa y emplear la tecnología. Un saludo desde Brasil.

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  6. Hildegard Susana Jung7 de julio de 2010, 20:43

    Acá en Brasil enseñamos español como LE (Lengua Extranjera)y el material que adoptamos nos trae algunas cositas de literatura (no textos, sino trocitos), pero muy poco. Nuestro gran problema es el tiempo para trabajar todo a lo que nos proponemos y aún darle tiempo al alumno a que participe y que utilice la lengua. En los niveles más avanzados se hace posible trabajar un poco de literatura, pero en los primeros niveles, como la compañerita Diana Suzuki, la salida es utilizar textos cortitos. Además, hay que llevarse en cuenta quiénes son mis alumnos. Por ejemplo: cuando el grupo es de profesionales ejecutivos que vienen a aprender español para el trabajo, o cuando son adolecentes, la poesía y los textos literarios ni siempre agradarán a todos. Hay que tener un buen "feeling" para el trabajo con textos literarios.

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  7. Trabajo en Yázigi y siempre he dado textos literarios a mis alumnos de los niveles: inicial 2, intermedio y avanzado. Generalmente les doy como lectura “El principito” o algunos cuentos. De esta forma trabajamos no sólo el vocabulario sino también la interpretación. En el caso de intermedio es posible también trabajar con el estilo directo e indirecto. Hasta hoy nunca he tenido ningún problema con el uso de los textos, los alumnos siempre aceptan bien la idea de leerlos, principalmente porque la mayoría no conoce casi nada de literatura española o hispanoamericana. Creo que los cuentos son más simples de trabajar, ya que es posible elegir algunos más cortos.

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  8. Trabajo también en Brasil y creo entender la posición de mi colega. Creo que los textos literarios siempre serán muy útiles para la enseñanza de ELE. Pero como lo han manifestado otros profesores, estos textos deben ser cortos, para realmente estimular al alumno a conocer la literatura española e hispanoamericana. Cuando se elige algo muy difícil de entender hace que ese estímulo se transforme en rechazo por aquella actividad.

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  9. Trabajo en Brasil, y si bien es necesario trabajar textos literarios para transmitir cultura, veo que los textos no pueden ser extensos y que deben traer informaciones que les interese a los alumnos. Lo que me parece viable es trabajar artículos de diarios o revistas,no textos técnicos pues es difícil trabajarlos ya que ellos ni siqueira conocen sus escritores no se interesarían por los españoles.

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  10. Yo utilizo los textos en todos los niveles, inclusive hay uno que les ayuda mucho a los brasileños llamado: "La presunta abueltita" de María Eulalia Alzueta de Bartaburo. En este texto se detallan, de manera muy didáctica,los "falsos amigos" y sus usos. Trabajando este texto en el nivel inicial se les "abren los ojos a los alumnos" sobre las dificultades que puedan llegar a enfrentar con la lengua española, especialmente en este asunto que puede traer malas interpretaciones para los lusohablantes. También me gusta utilizar los textos de "Los Viajes del Sr. Jonhson" de M. Jesus Herrero Smith, que también trabaja diferencias culturales y de léxico en los diferentes países de habla hispana. A mi modo de ver, es necesario usar este tipo de herramientas que tornan las clases más estimuladoras e interesantes.
    María Verónica - Campinas, Brasil

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  11. Estimados compañeros,

    Soy brasileña, me recibí en Letras hace algunos años y no he tenido todavía tan larga experiencia con la enseñanza de E/LE. Aún con una corta experiencia, creo que puedo decir que de hecho hay una dificultad en mi país de crear en los estudiantes el gusto por la lectura en general. Sin embargo, me parece que la literatura a lo mejor pueda ser un instrumento para que haya este cambio de perspectiva y de hábitos en nuestros estudiantes, ya que ella, desde mi punto de vista, es el estímulo para que uno pueda crear nuevos mundos, nuevas realidades y perspectivas sobre nuestro universo o sociedad. La lectura de un texto artístico, creativo, o sea, literario, estimula la imaginación así como los juegos, el cine, entre otros. Opino que la creación del hábito de la lectura sea un desafío para el desarrollo personal y lingüístico de todos nosotros y por lo tanto no creo que deba ser un género textual a ser abandonado en los materiales didácticos y tampoco en las clases, sino debe de ser trabajado juntamente con los textos periodísticos, publicitarios u otros.
    Lo que sí me parece interesante que haya es una constante creación de talleres, charlas y cursos en dónde se preparen los profesores en cómo trabajar la literatura en clase. O sea, como hacer tareas previas o posteriores a una lectura. Esta es una dificultad que siento yo y también me gustaría aprender hacerlo. ¿Cómo presentar tales textos tan ricos culturalmente y lingüísticamente a los alumnos? ¿Cómo encantarles así como nuestros profesores nos encantaron? Tampoco sabría decirles si fueron mis profesores que me enseñaron a soñar o si de hecho el propio proceso de lectura del Quijote.
    Muy bien, la discusión me parece tan larga como el desafío. Por fin, creo que también los materiales didácticos pueden ayudarnos con esto presentándonos alternativas de cómo presentar y trabajar los textos literarios en clase.
    El debate está interesante, compañeros. Desde Brasil, saludos a todos.

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  12. Débora nos manda este comentario:

    Suelo utilizar en clase los apartados culturales que figuran en el material didáctico adoptado en la institución en dónde trabajo. En el a veces sí, figuran fragmentos de textos literarios o biografía de autores conocidos. Me encantaría trabajar con textos literarios más largos tales como cuentos, sin embargo todavía hay dificultades de tiempo para cumplir los contenidos requeridos para cada nivel. A lo mejor, la adopción de un libro (texto literario), por parte de la institución, para que sea solicitada la lectura para cada nivel podría ser interesante también como un instrumento más de evaluación y posibilidad de poner los estudiantes en contacto con la literatura, utilizándola como herramienta pedagógica a la adquisición de la lengua extranjera. Me encanta trabajar con canciones, algunas de ellas de hecho muy poéticas, tales como los temas de Silvio Rodríguez. Algunos estudiantes no suelen tener tan buena recepción, sin embargo otros más “reflexivos” sí opinan sobre la letra y de ahí se puede trabajar muy bien los objetivos comunicativos. Creo que la poesía o textos poéticos y literarios en general deban ser introducidos y presentados en todos los niveles. A lo mejor en los iniciales fragmentos o cuentos cortos y en el intermedio, avanzado otros más largos. Me encantaría poder leer juntamente con mis estudiantes cuentos de Borges, por ejemplo. Sin embargo, para esto habría que tener una aceptación (no que no haya, seguramente hay) de la institución para que se pueda “perder una clase” entera en un trabajo previo a la lectura y posterior también.

    Creo que no había contestado las preguntas en el comentario que he postado, así que les dejo un borrador de respuestas a las cuestiones presentadas para que puedan hacer el mapa geográfico necesario.

    Trabajo en Yázigi Internexus, Paulínia, SP. Brasil.

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  13. Antes hay que pensar en la clase de literatura que se manda estudiar.
    Hay mucho tipo, y para todas las edades. A la hora de poner un tipo de lectura habría que pensarse si es la adecuada, y más cuando en una clase hay tanta diversidad de culturas, de formas de pensar y de ver porque lo que es muy real y sucede es que muchos de los estudiantes o jóvenes de hoy en día, están hartos de muchas cosas, se sienten cansados de todo,desmotivados.
    Si encima les mandamos literatura que (como me han comentado)la encuentran horriblemente aburrida, otros decían les daba naúseas y demás etc...es cada vez más difícil la tarea de enseñarles de inculcarles, hacerles comprender que es importante que no se queden estancados, que deben seguir adelante y hemos de ayudarles poniéndoles las bases que ayuden a incentivarles a que quieran aprender y ser lo que deseen.

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